SINOPSIS
Julian Kay (Richard Gere) es una clase especial de hombre. Juvenil, sensual y profesional, atractivo y siempre con la sonrisa en los labios, buscando clientes. Habla cinco idiomas, puede ejercer de guía, intérprete o simple acompañante. Su trabajo es el gígolo. Se mueve en un mundo de alto standing, lujo y mujeres de Los Angeles. Sus límites son las tiendas de Rodeo Drive, una casa de la playa de Malibú propiedad de Anne (Nina Van Pallandt), la mujer que arregla todas sus citas, su lujoso apartamento en Westwood, una casa en Bel Air de una esposa semi abandonada, Chasen's, donde cena habitualmente, Palm Springs donde puede conseguir rápidamente algún dinero y el Polo Lounge del Beverly Hills Hotel donde conoce a Michelle (Lauren Hutton). Michelle es una mujer hermosa, sensual y está sola. Casada con un senador, representa la parte de la esposa dedicada. Pero está a la expectativa y espera que pase algo que le cambie la vida. Conoce a Julian y llega hasta descubrir donde vive. Lentamente, con sutiles tanteos, va surgiendo entre ellos una extraña relación. Es entonces cuando aparece el detective Jack Sunday (Héctor Helizondo), que quiere interrogar a Julian sobre un crimen ocurrido en Palm Springs en el que, cuanto más ahonda en la investigación, más aparece implicado este gigoló. Su coartada no es comprobable. En su coche han sido colocadas algunas joyas desaparecidas y parece que alguien pretende inculparle del asesinato. Sólo Julian podrá descubrir los motivos. La película que consagró a Richard Gere como actor y sex symbol tras llegar de rebote al personaje de gigoló que interpreta, tras haber sido rechazado por John Travolta. La película es una estupenda variación sobre el tema de la regeneración moral a través del amor que narra la vida y métodos de trabajo de un gigoló, con un estilo entre el semi documental y el thriller político. Paul Schrader incide una vez más en uno de sus personajes de tortuosa trayectoria con un desenlace que le redime de los errores de la vida.
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