SINOPSIS
En tiempos de la ley seca, Mike Murphy, antiguo policía, mantiene una pequeña agencia de detectives que apenas da para vivir en Kansas City. Tiene una secretaria que lleva tres meses sin cobrar y un socio, Dehl Swift. El problema de Swift es que no sabe cuáles son sus limitaciones, y cuando un día aparece por la oficina con dinero suficiente como para pagar los atrasos del alquiler y el sueldo de la secretaria Addy, Murphy empieza a temerse que su socio se haya metido en un lío demasiado grande para salir de él con sus propias fuerzas. No se equivoca, y cuando el plan de Swift, que consiste en enfrentar a unos gángsteres con otros, fracasa, es él quien debe procurar salvarle la vida. Le sigue de cerca el teniente Speer, decidido a atrapar a los gángsteres... y no demasiado convencido de que no deba echar al detective en el mismo saco. Aunque el policía y el detective se ponen todos los cebos posibles en cuanto se les presenta la oportunidad, templa su antagonismo un respeto mutuo que ambos reconocen con bastante disgusto. Menos disgusto le causa al teniente la atracción que siente por Addy, quien, a pesar de ser leal a Murphy, no es totalmente inmune a la atención de Speers. Cosa que no es de extrañar teniendo en cuenta que tiene muchos asuntos en que pensar, como, por ejemplo, en cuál puede ser el paradero de una cantante de un club nocturno en el que se sirve alcohol ilegalmente, una mujer llamada Ginny Lee. Las relaciones de Ginny con Swift y el hecho de que haya sido testigo de un horrible crimen, la han colocado a la cabeza de las posibles víctimas de los matones del hampa y Speer, junto a Murphy, quieren encontrarla antes de que la localicen sus enemigos. Desenfadada comedia de ambiente policiaco que inicialmente tenía que haber dirigido Blake Edwards, pero que desavenencias con los estudios le llevaron a retirarse del proyecto, si bien aparece como guionista con el seudónimo de Sam O. Brown, recayendo la dirección en el actor-director Richard Benjamin. El reclamo del filme se encuentra en la reunión de dos puntales del género de acción durante la década de los setenta, Clint Eastwood y Burt Reynolds, que incorporan a un teniente de policía y un detective privado sin suerte que mantienen posturas divergentes a la hora de combatir a un gángster. Una esperada recreación ambiental de la ciudad de Kansas City durante los años treinta supone un añadido más a los muchos aspectos meritorios del filme.